Es extraño, mucho.
Aún a día de hoy me cuesta expresar mis sentimientos, o simplemente cómo me siento.
Antes de que nacieras, pensaba...
-cuando nazca... cantaré
-o cuando nazca... le contaré historias
Ahora intento escribir aquí parte de lo que siento, quiero que quede para ti, para cuando preguntes y la memoria falle al intentar recordar tantos momentos, días, horas, noches en vela sin poder dormir demasiado. Ruidos al tenerte dormida, tus despertares, tus llantos y quejas... Serán tantas...
Hoy te tenía en brazos, mamá te había dormido y yo, impaciente, deseaba el momento de tenerte en brazos. Al poco comenzaste a retorcerte, y me quedé con la mirada perdida en tu gesto, tus expresiones.
Como se movían tus labios al hacer fuerzas y estirarte, como apretabas los ojitos o arqueabas las cejas, como cerrabas los puños y los frotabas con tu cara... Ha sido todo tan emocionante que se me olvidó que te quejabas (querías teta, o eso parece)... Y claro está
Te despertaste
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